'Song 2' (by Isa)

Tengo este post en borradores desde el febrero de 2012, que se dice pronto... ocho años. ¿Por qué? pues vete tú a saber... Aunque la potencia buenrollera de Blur en general y de  'Song 2', en particular, es indudable, se ha ido quedando postergado porque siempre surgía algún otro temazo que se colaba, como una de esas señoras espabiladas que una se encuentra en la cola de súper.

Hace poco volvió a mi memoria como ha sucedido de forma recurrente a lo largo de estos años. Fue la pasada Nochevieja, bailando en un garito (después de muchas nocheviejas sin salir a bailar). Puede, de hecho, que fuera de las pocas canciones que salvaron de la muerte segura a un DJ mediocre (siendo suave). Ni que decir tiene que el tema revolucionó la pista de baile y que hizo saltar desaforadamente a un público de 20 a 70 con el poderosísimo riff de Graham Coxon y con los yu-jús de Damon Albarn (Woo-Hoo, en el idioma del rubio).

En ese momento, o para ser sinceros al día siguiente una vez vencí la resaca, decidí que ya estaba bien y que este sería mi primer tema del año en Canciones de Buen Rollo. Lo de la resaca no es moco de pavo, si se tiene en cuenta que el propio Albarn reconoce haberla compuesto bajo los sudores fríos de una hangover antológica.  La providencia ha querido que además se haya dado la coincidencia numérica mágica que persigue a la canción más emblemática de Blur, qué mejor que publicar un post sobre 'Song 2' el 2 del 2 de 2020... Bueno, sí, podría esperar a 2022, pero paso.

Según la Whiskipedia (sic Rubén Marcos), en la presentación del 'Song 2', Albarn dijo que se llamaba así porque aún no le habían puesto nombre, pero el caso es que el título se quedó así, coincidiendo con que es la segunda canción del álbum, fue el segundo sencillo en publicarse, que alcanzó el número 2 en las listas británicas, que tiene dos versos, dos coros y dos puentes y que dura exactamente dos minutos y dos segundos.

La inyección de energía es incuestionable, ¿sí o no? Y el amigo Damon está monísimo, se le ve súper yougurín aunque en el 97 cuando se publicó el 'Blur' ya tenía casi 30 palos. Da igual. Ya sabéis que yo tengo debilidad por los rubiejos de ojos claros y pinta de desarrapao british. Una tara como otra cualquiera. El contraste de claroscuro, los golpetazos contra la pared, el tapizado como de cachemir rococó de casa victoriana, el viento huracanado y sobre todo, el buen hacer de Sophie Muller haciendo vídeos musicales, le favorecen.

Por lo visto, el tema pensaba ser una parodia del grunge y del rock alternativo americano que estaban tan de moda en los noventa. Tanto la melodía como la letra son deliberadamente simplonas, según Albarn, precisamente por eso (y por la resaca mencionada antes, que cuadra con ese "I got my head checked / by a jumbo jet"). Por suerte (o por desgracia) acabó siendo una canción reivindicada por los seguidores del estilo que trataban de criticar, además de ser el mayor hit de la banda, sin duda el más difundido.

Sea como sea, 'Song 2' forma parte de mi vida sonora, de mis veinte años, de mis noches de entonces y me hace rejuvenecer siempre que la escucho. Y saltar. Y gritar.

WOOOOOO-HOOOOOOO