Ha tenido que morirse Conchita Velasco, la gran Concha, para caer en la cuenta de que este himno contra el desamor no estaba aún en CBR. ¿Quién no ha bailado alguna vez la Chica Ye-yé moviendo la cabeza desaforadamente y tratando de imitar esa voz suya tan característica? Yo, desde luego, muchas veces y en garitos rockeros llenos de la cochambre juvenil tan característicos en los 90, e incluso años después, ya en este siglo, en las bodas de amigos, en las fiestas de Año Nuevo o cumpleaños. Una canción que hace bailar a varias generaciones de españolitos desde hace casi 60 años no puede ser considerada más que un clásico sin paliativos.
sábado, 2 de diciembre de 2023
Chica ye-yé (by Isa)
Ha tenido que morirse Conchita Velasco, la gran Concha, para caer en la cuenta de que este himno contra el desamor no estaba aún en CBR. ¿Quién no ha bailado alguna vez la Chica Ye-yé moviendo la cabeza desaforadamente y tratando de imitar esa voz suya tan característica? Yo, desde luego, muchas veces y en garitos rockeros llenos de la cochambre juvenil tan característicos en los 90, e incluso años después, ya en este siglo, en las bodas de amigos, en las fiestas de Año Nuevo o cumpleaños. Una canción que hace bailar a varias generaciones de españolitos desde hace casi 60 años no puede ser considerada más que un clásico sin paliativos.
viernes, 13 de octubre de 2023
IAMX reivindica su lugar en el Olimpo del Tecno (crónica de Efrén)
En la sala Mon, de estética similar a los míticos locales berlineses de rock industrial, cientos de graffitis nos dieron la bienvenida acompañando nuestra entrada por largos pasillos hasta el Averno, donde una sala reducida, pero de amplio escenario, aguardaba paciente la aparición de este proyecto musical, llamado IAMX.
miércoles, 6 de septiembre de 2023
'Don't Wanna Go Out On The Weekend' (by Carol)
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Chris Penney por los aires (foto: Facebook Private Function) |
sábado, 24 de junio de 2023
Depeche Mode, un estilo de vida (by Efrén)
Memento Mori, frase latina cuya traducción literal es “Recuerda que morirás”, da nombre al nuevo álbum y gira mundial de Depeche Mode, el grupo más famoso y esencial de la música electrónica.
Este último disco nos transporta a la esencia del grupo, una vuelta a los orígenes con una aportación evidente de sus ritmos más sintetizados y reconocibles. La iconografía que envuelve este nuevo viaje nos recuerda que todo tiene un final, un sentido trascendente y melancólico en justo homenaje a Andrew Fletcher, miembro fundador del grupo y fallecido el año pasado. Encontrar la forma de proseguir tras un duelo resulta difícil, pero el show debe continuar.
Tantas décadas siguiéndoles por diferentes puntos de la Península, me hicieron comprender que alma y cuerpo necesitaban una nueva perspectiva, un clavo ardiendo y lejano al que agarrarse. En un latigazo emocional, pensé en girar la rueda del destino y buscar una sede europea que me permitiera respirar descartando criterios gastados y caducos, suprimiendo postureos festivaleros cuyo valor no trasciende más allá del simbolismo “instagramer”. Ahorrar esperas y agonías, alejarme de la toxicidad. Prefería un concierto de estadio, una elegancia perpetua que pudiera ayudar a encontrarme, una catarsis en busca de la esencia. En una fugaz búsqueda, cuadrando fechas, ciudades y vuelos a contrarreloj, la elegida fue Berna, capital de Suiza y Patrimonio de la Humanidad.