Las CBR veraniegas de Sebas Puchal

Surferas en Waikiki, ideales de la muerte.

Sebas Puchal es uno de nuestros primeros lectores, de los más queridos y admirados y también de los primeros con los que empezamos a comadrear en esto del bloguerismo musical. Su excelente blog, Grafistantáneas, es un enciclopedia de canciones y grupos, una mina llena de oro en la que bucear y sacar lingotes cada vez que uno se sumerge en ellas. Es para nosotras un honor contar con sus 5 CBRs veraniegas: 


Cinco canciones veraniegas imprescindibles... pfff, menudo reto proponen nuestras buenrolleras favoritas. Podría escoger más de cien (siendo conciso), pero por una vez voy a intentar contenerme y resumir en cinco instantáneas, las melodías que marcaron varios de mis veranos, entre la adolescencia y la juventud, otros muchos temas llenaron mis vacaciones estivales, pero sólo la distancia y cierta carga nostálgica pueden convertir algunas canciones en míticas e imprescindibles, una selección ni tan ecléctica ni tan previsible como suponía. Viniendo de mí, ya sabéis ;-)

Comenzaré por el principio, por uno de aquellos dicharacheros temas yeyés que acompañaron mis primeros veranos, canciones optimistas con olor a salitre, que evocan imágenes de bikinis sesenteros, balones hinchables de Nivea y cremas con aroma a coco. Posiblemente este "Con te sulla spiaggia" ayudó a consolidar el fenómeno de la canción del verano, nacido en los festivales estivales de Francia e Italia... aunque me gusta mucho Nico Fidenco (su autor e intérprete original) os dejo con estos pachangueros italianos dedicados al "revival" festivalero 60/70's llamados Onde Beat. 

 

Dejamos atrás la inocencia infantil para rebuscar entre mis recuerdos de adolescente, corrían los años 80, los veranos transcurrían entre playas y parques de barrio, primeros enamoramientos, sueños de besos y promesas y el pop español escupía letras que identificábamos como propias, en pleno auge del tecno, Los Pistones nos devolvían un sonido en la mejor tradición de los Brincos: "Que el sol te dé", sencillez, vitalismo y pop-rock sin pretensiones.

 

No se puede hablar de los ritmos veraniegos si mencionar a los Beach Boys, para ello hacemos una parada en la adolescencia (tal vez por que recuerdo aquellos veranos como un universo de descubrimientos vitales) y recuperamos uno de los temas estrella de la banda californiana pero en la juvenil, dulce e idolatrada voz de uno de los juguetes rotos mas populares de los 80. Su melena rubia y su cara angelical le hicieron brillar en todas las carpetas de las adolescentes del momento, un pop "chicle" que merece ser recordado siempre en verano, hacemos pues hoy un hueco al chico dorado, Leif Garrett y aquel estupendo "Surfin U.S.A." 

 

Llegaron otros veranos, las primeras copas, terrazas, discotecas, los colegas comenzaban a tener su primer coche, y por supuesto los casettes que machacábamos una y otra vez de ruta hacia la discoteca de moda (nunca me gustaron mucho, pero entre mi afición por pinchar discos y la necesidad de ligar, conocí todas las de la zona). Como sabéis, en Valencia la música electrónica pegó mucho, y ciertos temas se convirtieron en imprescindibles en cualquier farra nocturna, entre muchos otros, por su ritmo, su armonía artificial y su buen rollo imperdurable, rescato este pegadizo "Just can't get enough" de los británicos Depeche Mode.



Y para finalizar os haré una revelación (alguien debía decirlo), los veranos están hechos para pillar cacho, todo soltero/a que se precie no puede rendirse unicamente a los ritmos facilones y a la fiesta, hay que mantener en la recámara algún tema por si "la noche se da bien". Debo reconocer que tenía muchos de estos, siempre me ha gustado lo de "cuidar el ambiente", Chris Isaak y aquel "Wicked Game" (con ese vídeo playero) me dio mucho juego, sin embargo siempre me gustó ser distinto y revivindicar aquellos romanticos affaires/rock de pelis como Grease, the Wanderes o Dirty Dancing (recordar que hablo de mi adolescencia eh), por lo que me gustaba sorprender a las chicas con bonitas baladas sesenteras, slow rock, como esta preciosidad creada para el cine en 1978, "Shama Lama Ding Dong" de Otis Day and the Knights, música para soñar, amar y disfrutar del verano.