DIEZ AÑOS DE CBR

domingo, 29 de noviembre de 2015

Ama, ama, ama y ensancha el alma (by Carol)

Ama, ama, ama y ensancha el alma
Robe Iniesta, capturado en plena acción por la cámara de la intrépida Ana F. Barredo

Después de muchísimos años, el otro día volví a escuchar por casualidad ‘Ama, ama, ama y ensancha el alma’. Y me vinieron a la mente muchos buenos ratos escuchándola en los bares que frecuentaba de veinteañera, y también en casa, que anda que no dio vueltas y vueltas este CD en mi reproductor. Y pensé que esta canción tan bonita y tan vitalista tenía que estar en este blog.

Con Extremoduro me pasa un poco como con esos antiguos amores a los que sigues guardando cariño. Te alegras al verlos, aunque sientes esa rareza de encontrarte con alguien que fue importante en tu vida, pero ya no, y no puedes evitar un poco de pena o nostalgia. Fui muy fan de Extremoduro y su “rock kalimotxero”, como me decía un amigo para hacerme rabiar, durante unos años, a mediados de los 90. Sus cuatro primeros álbumes sonaban sin parar en mi casa, compartiendo estantería con Los Enemigos, con Los Flechazos, con Creedence, con Beatles y Stones y con un puñado de bandas mod españolas a las que seguía mucho entonces. Todo es compatible, ¿verdad?

El “romance” terminó con Agila, un disco con canciones estupendas y el último del Robe que compré. A partir de ahí me pasó como con Sabina: ya todos los temas me sonaban igual. Probablemente no es cosa del músico, sino de una misma. Los gustos cambian y al final sólo los clásicos sobreviven a la implacable criba del tiempo. Extremoduro se quedó tan fuera de ella que ni siquiera me traje sus discos a mi casa de Madrid.

Pero hubo otra razón. Agila fue el disco con el que “lo petaron”, y no es en absoluto casual que ahí empezara mi alejamiento. De pronto veías a todos los pijéis de mi pueblo cantar a voz en grito en los bares ‘So payaso’, bailando con sus camisas de caballo en la pechera como si fueran fans del Robe de toda la vida. Gente que, por cierto, se habría cruzado de acera de encontrárselo por la calle, que no sabía ni decir bien el título del disco (“Águila”, “Agiliza”… de todo se oía).

Ya, éste es el eterno debate sobre esnobismo musical. Lo admito, soy una pedante y me fastidia ver a los grupos que me gustan convertirse en pasto de radiofórmula, como le pasó a Extremoduro. Por supuesto, todo el mundo tiene derecho a ganar dinero, pero luego no pretendas ir de auténtico y de marginal por la vida. El Robe decidió apostar por 40 Principales y su calidad cayó en picado. Seguramente él se pasa por el arco del triunfo mi opinión y la de tantos como yo, pero yo hago lo mismo con sus discos, así que estamos en paz.

Pero… ¡ah, sí, que estaba hablando de una canción que me gustaba! Centrémonos en ‘Ama, ama, ama y ensancha el alma’ y en el buen rollo que desprende. Incluida en su tercer álbum de estudio, Deltoya, Robe Iniesta la compuso a partir de un lindo poema de Manolo Chinato. Habrá a quien le suene a monserga jipi trasnochada, pero a mí me parece una emotiva exaltación de lo que es de verdad importante: el amor, la libertad, vivir tu vida a tu manera. Una invitación a salirte del “camino social alquitranado” y a no vender tu alma por alcanzar eso que llaman éxito. A ser buena gente y no una trepa despreciable. ¿Estoy siendo naif? Miro a mi alrededor y veo que la mayoría de quienes me rodean tienen buen corazón y buena cabeza, y eso me llena de optimismo. Los cretinos están en minoría, aunque hagan mucho ruido.

Hay un montón de directos en Internet, pero prefiero que escuchéis la versión grabada, que me mola más y además tiene unos coros femeninos que le quedan muy bien:



Os dejo con Manolo Chinato recitando su poema en pleno campo. ¡Que os enfrentéis a la semana con alegría y con ganas de hacer el indio!



Actualización a las 10:57 horas: he cambiado la foto que abría el post por una mucho más molona, obra de Ana F. Barredo. La mejor fotoperiodista a ambos lados del río Sil y una tía genial. ¡Gracias, Anita!

10 comentarios:

  1. Uhm, sip, supongo que el Robe se pasará por donde quiera la opinión de aquellos seguidores que le disteis la espalda arropado en los dineros que ganó, lo que es una pena, porque en cierto modo desacredita un poco lo que había hecho antes. A mi directamente me llegó la oleada de repulsa, así que nunca les hice el hueco que se merecían entre mis discos kalimotxeros -para snobs los metaleros, como mi círculo de entonces... :P

    Eso no quita tengan grandes temas y éste es uno de ellos; positivo, cosa rara en ellos, ¿no?

    Por cierto, sí que molan los acompañamientos de la canción =)

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    1. Sí, diría que éste es uno de sus temas más luminosos. Aunque en su discografía abundan las letras sobre el amor, es siempre un amor turbio, o desamor, o en un contexto muy oscuro. En cambio, esta canción te da ganas de salir al balcón a cantarla a grito pelado :-)
      Pese a lo dicho, defenderé siempre los cuatro primeros discos de Extremoduro como merecedores de un lugar de honor en el rock español. Pero sí, yo también creo que lo que vino después desacreditó lo que había sido. Recuerdo que me quedé pasmada cuando le vi presentando su disco "Iros (sic) todos a tomar por el culo" en la sede de la SGAE. Y pensar que su primer y buenísimo álbum, "Rock transgresivo", lo vendía él mismo por la calle en casete...

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  2. Casualidad , la escuché en el programa Rockalsol, el viernes .

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    1. Uy, pues nos leímos las mentes ;-) ¿Qué programa es ese?

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  3. Te comprendo perfectamente. De hecho, me pasó algo parecido. Tenía un amigo que siempre ha sido muy de marcar tendencias. Normalemente solía minusvalorar todo lo que él no conociera, que era bastante, y explotar hasta la saciedad ciertos grupos, tendencias o forma de vestir. El verano que me habló de Extremoduro supo que iba a haber un antes y después en mi relación entre la discografía de Robe y yo.

    "A ver qué me dice después".

    Besos.

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    1. Quizá éste sea el momento de reconciliarnos con la obra del Robe, quién sabe...
      ¡Encantada de tenerte por aquí, Álvaro! ¡Gracias por pasarte!

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  4. Tremendísimo tema... efectivamente es de lo más alegre en la discografía de Extremoduro.
    A ver, yo entiendo la cosa pero no la comparto del todo. Los discos previos al Agila son muy puros y políticamente incorrectos pero no me parece justo para el grupo negarles la calidad del Agila porque los convirtiera en mainstream.

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    1. Jeje, tienes razón, sobre todo teniendo en cuenta que incluía grandiosidades como ésta: https://www.youtube.com/watch?v=brcM2bRfr_0 Pero ya sabes, soy exagerada, tremendista y esnob.

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    2. Si eres bueno, hay un punto en el que la fama te salpica... lo peor es perder la esencia, que supongo que es difícil de preservar. A mí me pasó algo así con Metallica. A partir del album negro, nada volvió a ser lo mismo.

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