DIEZ AÑOS DE CBR

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Bailaré sobre tu tumba (by Isa)

Como bien dijo Carol en su último post, ya va tocando algo de música buenrollera patria que la hay abundante y de calidad... además de algunos altos exponentes del rock gamberro y hooliganero que tanto me mola y que tan bien viene para poner ritmo a la indignación (siempre desde el humor).

Y es que estoy violentamente indignada después de acontecimientos como el de ayer (#25S) en el que una concentración de ciudadanos legitímamente hartos que intentaron rodear simbólicamente la cámara que supuestamente les representa acabó con una batalla campal que se ha saldado con más de 60 heridos (uno de ellos, grave).

La violencia salvaje desde el esperpento es la base de la canción que he elegido para resarcirme y descargar adrenalina contenida: 'Bailaré sobre tu tumba', uno de los temas más conocidos de un grupo con nombre de balance catastrófico, Siniestro Total.

Los Siniestro son una de las bandas españolas más emblemáticas del rock punk de los ochenta, y una de mis favoritas de todos los tiempos. Me encantan esas letras que mezcla prosa descarnada con desvergüenza pura y dura, y su impecable sonido instrumental, con directos antólogicos (suenan justo como tienen que sonar un buen grupo de rock).

La semana pasada coincidí en Twitter con Julián Hernández (@juliansiniestro), líder y miembro portavoz de la banda gallega, entre otras cosas porque el tío participó, como reputado tuitero, en la presentación de la Guía de uso del castellano en las redes sociales elaborada por la Fundéu, "Escribir en Internet". Casi ná.

'Bailaré sobre tu tumba' es una canción compuesta en 1985 y publicada en su álbum homónimo de ese mismo año, que parte de una frase inspirada en un fragmento de la película Cotton Club, en el que dos hermanos que se dedican a bailar claqué, hablan de un matón que ha amenazado a uno de ellos:
—Tú solo no puedes matarle..., pero puedes bailar sobre su tumba.
—Lo mataré con mis zapatos de claqué.

Aquí os la dejo, en su trepidante versión en vivo, que irremediablemente tengo relacionada con "la chica muy mona que vivía en Barcelona", la prota del tema que tocan inmediatamente después, 'Assumpta'. Degustadla como se merece -saltando con virulencia- y recordad lo que dicen estos sabios vigueses: "Ante todo, mucha calma".

viernes, 21 de septiembre de 2012

It Must Be Love (by Carol)

Había decidido que mi post de hoy sería sobre una canción en español, que estamos muy anglosajonas últimamente. Luego, con los acontecimientos políticos de la semana, pensé en algo más combativo (por si alguien ha estado viviendo estos días en la Estación Espacial Internacional y no se ha enterado: dimisión de la Espe, muerte de Santiago Carrillo y, menos divulgado pero no menos significativo, nueva demostración de fuerza de las autoridades desalojando el Centro Social Okupado Casablanca de Antón Martín). Pero resulta que, de camino a casa, saltó esta canción en mi mp3 y... ¡cómo resistirse a algo que te hace sentir tan contenta y ligera de equipaje!

No soy una persona romántica y mantengo posiciones cada vez más escépticas en cuanto a eso que llamamos amor. Pero hoy estoy optimista, vaya usted a saber por qué, y pienso en que últimamente hay un montón de gente enamorada a mi alrededor, y eso es bonito, y desprenden buenas vibraciones y son tan felices que nos hacen felices a los demás también.

Eh, que no cunda el pánico. No voy a ser tan incauta como para ponerme a dar la chapa sobre este tema sobre el que nadie ha escrito nunca nada apenas. Qué pereza, oigan. Sin embargo… qué cosa tan rara, el amor. A veces piensas que nunca sabrás lo que es o que no volverás a sentirlo; a veces lo encuentras cada noche en una persona distinta, aunque con la luz de la mañana el espejismo se desvanezca. A veces una canción consigue hacerte creer en que existe de verdad, aunque sólo sea por unos minutos. (Otras veces también contribuye a tu convicción de que es una basura inmunda, pero ya hablaremos de eso otro día).

'It Must Be Love' es de ésas que te devuelven la fe. Es escucharla y sentir un subidón y unas ganas de abrazar a todo el mundo y cantarla a coro… Como sabréis, éste es uno de los temas más conocidos de Madness, legendaria y skatalítica banda a la que lamento enormemente no haber visto nunca en directo. (Uf, lo que tiene que ser en directo el 'One Step Beyond', una de las canciones de toda la historia de la música que más ganas me dan de ponerme a hacer el cabra…).

Editada como single en 1981 en el no menos legendario sello Stiff Records (recordad: "If It Ain't Stiff, It Ain't Worth a Fuck"), 'It Must Be Love' es en realidad una versión de la original del poeta y músico británico Labi Siffre, dato que, honestamente, desconocía hasta este momento. Con todos los respetos a este hombre, la versión de Madness se come a la suya con patatas, convirtiendo lo que era una cancioncilla agradable sin más en un temazo emblemático. Vosotros diréis...



Lo mejor es que una letra tan romántica y naïf está ilustrada con un vídeo absolutamente delirante, haciendo honor al nombre y la reputación de Madness. El momento “Gallina Caponata por los aires” es brutal. En gesto de buena voluntad, el Sr. Siffre tiene un cameo (es el violinista sonriente que sale al final).

Para empezar el fin de semana con el corazón rebosante de amor, felicidad y ganas de pillar cacho, aquí os dejo este maravilloso 'It Must Be Love'. Nothing more, nothing else. Love is the best (or maybe not).


martes, 18 de septiembre de 2012

September (by Isa)

Septiembre un mes que no deja a nadie indiferente, con connotaciones meláncolicas, de cambio de estación, de final de las vacaciones y de comienzo de curso... El fatídico (o anhelado, que en esto hay para todos los gustos) mes de la vuelta al cole.

Para que os voy a engañar, Septiembre no es santo de mi devoción... por eso, no se me ocurre mejor tema buenrrollero para paliar los estragos de la depre postvacacional que 'September', temón de Earth, Wind & Fire, una de las bandas que ha generado más canciones bailongas levanta-ánimos del mundo mundial...

Y es que si en el último post, Carol hacía un homenaje al soul nacido al albur del gospel y el blues en Memphis y en la mítica Stax Records, con la figura estelar del gran Otis Redding hoy nos vamos un  poco más al norte, a Chicago, de donde acabo de regresar completamente enamorada, y a la Chess Records, en donde trabajaba como percusionista de estudio Maurice White, el fundador de la banda.

Chess Records nunca trabajó con Earth, Wind & Fire y de la discográfica no queda más que el recuerdo -inmortalizado en una peli -Cadillac Records- y tenuemente distorsionado por la Fundación de Willie Dixon, que ahora ocupa el edificio y donde uno de sus nietos te cuenta los detalles de la vida del gran compositor de blues... pero los músicos que salieron de allí  marcaron algunos de los capítulos más importantes de la historia de la música negra americana, o más bien de la música contemporánea mundial...

Earth, Wind & Fire pasó por todos los estilos por los que un grupo musical podía pasar en los setenta,  aunque puede que haya quién solo los recuerde por su estética 'discreta' y por su multitudinaria puesta en escena. 'September' mezcla R&B, disco y una letra de lo más popera, y es uno de los hitos de su época dorada -y de lentejuelas-. Aquí os la dejo:



'September' no solo es el tema que me está alegrando la vuelta a la rutina si no también el protagonista de la la escena con el que comienza la última peli que he visto en el cine (Intocable) y que os recomiendo encarecidamente ;-)

viernes, 14 de septiembre de 2012

Hard to Handle (por Carol)

Hace poco un asiduo lector nos recordaba que en este blog tirábamos mucho de Motown, pero teníamos algo aparcado al no menos grandioso sello Stax. Siguiendo el hilo “monárquico” que abría Isa la semana pasada con Elvis, voy a intentar saldar esa deuda. Levántense para recibir al Rey del Soul, Mr. Otis Redding

A Otis, que era de familia humilde y trabajó casi de cualquier cosa hasta que consiguió ganarse la vida con la música, su gran oportunidad le llegó de rebote. En octubre de 1962, la banda en la que militaba entonces, The Pinnetoppers, llegaba a los estudios de la Stax en Memphis para una grabación, que terminó antes de lo previsto. Ya que el estudio estaba pagado, Otis consiguió que le permitieran aprovechar ese tiempo extra para grabar un par de canciones. De ahí saldría su primer éxito, These Arms of Mine, con el que llamó la atención de los capos del sello y dejó claro su talento y las cualidades que le hacían distinto al resto de soulmen. Tenía una voz fantástica, sí, pero por lo que realmente consigue emocionarnos tanto es por la fuerza y la pasión que imprimía a sus temas. En palabras de Booker T. Jones, quien presenció esa sesión: “No era la fuerza de su voz ni su registro, sino la manera en que cantaba. Era todo emoción. Era como: “Este tipo no canta por dinero”. No creo que nunca lo hiciera por eso”. 

Nuestro hombre murió en un accidente de avioneta con 26 años, en desgraciada coincidencia con muchas estrellas del rock. Sin embargo, dejó tras él un legado de canciones increíbles, algunas tan populares que mucha gente conoce a Otis incluso sin saberlo. Así, sin pensarlo mucho, me vienen a la cabeza al menos cinco anuncios con su música. Él, que demostró un gusto excelente para las versiones (su Shake casi me gusta más que el original de Sam Cooke, con perdón), ha sido versionadísimo, y no siempre con resultados felices (Michael Bolton: ¡quita tus sucias manos de (Sittin’ on) The Dock of the Bay de una vez!). Pero su magia permanece aunque las escuchemos una y otra vez.

Precisamente la canción que he elegido fue editada tras su muerte, y claro, no hay imágenes suyas atacándola en un directo tan salvaje como el del Festival de Monterrey de 1967. De hecho, he estado a punto de decantarme por Shake por eso, porque verle en directo es (debió ser, imagino) una experiencia flipante. Pero… no, definitivamente, Hard to Handle es mi favorita desde que la escuché con 17 años en un vinilo prestado, que grabé en una cinta TDK, como era de rigor, en la que se escuchaba saltar la aguja en un momento dado, y que no puede faltar en ninguna fiesta que se precie de serlo. Esos aullidos, esa sección de metales tan increíble… ¡esa letra de “no puedo ser más chulo, nena”!:

Action speaks louder than words
And I'm a man of great experience
I know you got another man
But I can love you better than him

Take my hand, don't be afraid
I'm gonna prove every word I say
I'm advertisin' love for free
So, you can place your ad with me


Posología: no escuchar en el curro, en la biblioteca municipal ni en ningún otro lugar público en el que haya que permanecer en silencio y guardando la compostura. No respondemos de las consecuencias cuando os pongáis a bailar allí mismo como si no hubiera un mañana. Administrar a mansalva en noches de farra loca y en caso de necesitar un subidón de moral instantáneo.





Esa banda tan molona que eran The Black Crowes (creo que no siguen en activo, de ahí el uso del pasado; corregidme si me equivoco) tiene una versión muy cañera también.





La influencia de El Rey del Soul se extiende a las novísimas generaciones de souleros, como mi admirado Eli ‘Paperboy’ Reed. Igual es una flipada mía, pero no me digáis que este I’m Gonna Getcha Back le debe mucho a Hard to Handle. Otro temazo que te mueres, y con un directo de los de no perdérselo. Ya que no podemos ver a Otis, al menos tenemos a Eli. (Bueno, tampoco he encontrado un vídeo en directo con audio aceptable y que no parezca filmado por un enfermo de parkinson, lo siento).




No puedo cerrar este post sin recordar El mejor cóctel, legendario homenaje de los seminales Brighton 64 a los grandes maestros del Soul, y a su vez otro llenapistas brutal. ¡Otis, Jackie Wilson y Sam Cooke!

martes, 4 de septiembre de 2012

(You're the) Devil in Disguise (by Isa)

Estar en Memphis es pensar en El Rey y yo estoy en Memphis. Me ha costado llegar. He tenido que sortear nada menos que un huracán, el Isaac, que me ha tenido encerrada dos días en un hotel de Nueva Orleans... Y es que el Viejo Sur es una tierra castigada por tormentas y tornados, uno de esos rincones del planeta en los que las catástrofes naturales son 'naturales'...

Hay lugares malditos, en los que sus habitantes miran con desconfianza los escasos períodos de bonanza sabedores de que no pueden durar mucho, de que tarde o temprano les llegará la desgracia, como si hubiesen ofendido a Dios... O se hubiesen aliado con el mismísimo diablo.

El vudú, las creencias paganas mezcladas con una espiritualidad extrema hacen de los estados surcados por el Misisipi un caldo de cultivo excelente para las leyendas demoníacas y para la música... Y para historias de músicos que venden su alma al diablo...

No en vano se han engendrado aquí algunos de los ritmos más notables de la historia de la música contemporánea: el Blues, el Jazz, el Soul... Y cómo no, el Rock ‘n' Roll ¡y su Rey!

Devil in Disguise es una de mis canciones favoritas del gran Elvis Presley. Compuesta por el trío Giant, Baum and Kaye y lanzada por la discográfica de Elvis en Nashville en 1963, el tema triunfó como la Coca-Cola a ambos lados del Atlántico...

Y es que hasta John Lennon flipó con Devil in Disguise y con el registro vocal del Rey comparándolo con Bing Crosby... En la letra, Elvis acusa a una chica de ser el diablo disfrazado, pero yo creo que la canción le describe perfectamente a él: parece un ángel, anda como un ángel, habla como un ángel, pero... ¿O no?